A este pez mayormente solitario le gusta
tomar el sol en la superficie del agua para regular su temperatura después de
nadar en aguas más frías y para dejar al descubierto sus aletas con el
propósito de liberarse de parásitos.
Escaso de depredadores naturales, suele nadar
sin preocupaciones y sin inmutarse si hay algún posible enemigo cerca. Al parecer
migra en verano y primavera a latitudes más altas para ir en busca de comida
El alimento favorito del pez luna se compone
de medusas, ahora abundantes en la costa Malagueña y zooplancton, pero también
come crustáceos, salpa, algas y larvas de peces. Su dieta es realmente pobre en
nutrimentos y el pez tiene que consumir grandes cantidades de alimento para
compensar ese hecho y mantener su tamaño y peso corporal.